Mostrando entradas con la etiqueta madeira. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta madeira. Mostrar todas las entradas

MALUCAS EM MADEIRA (III parte)


.

Como soy una rebelde y ya son dos los lectores que me hacen llegar su desinterés por Madeira. Prosigo (¡y acabo!).


Tarde siguiente.
Una borracha putilla arrepentida.
Nos vamos a fumar con mi maderiense londrino. (El chico al que le gustó mi parche de pirata/ojo morado de mujer maltratada el día de carnaval). Pagan cervejas, lian charros y gran gran conversación. 

Él (Fabio) y sus amigos Milton y Pedro resultan ser unos idealistas de lo más graciosos.  Quieren abrir una radio y comenzar una Révolution! 
Le miro, le toco, su ex era escorpio. 
Las 6 de la mañana. Se va en dos días de vuelta a Londres. Despedida y promesa de cena al día siguiente.

Llega mañana. 
Fabio no puede quedar. Insistimos. Nada. Le mando un mensaje de despedida e insinuación.
Llamamos a Marta. Ella y sus amigos están celebrando la noche hippie en el amazonia. Allá que vamos, después de la parada obligatoria en el Old Bar.
Unos bailes. Nuevos amigos de marta. Recuento: Marta, Lia, Erika, Pascual (rollito de lia) y Magno.
De aquí para allá, Deo haciendo amigos, yo a mi bola esquivando las miradas de Magno. Se me acerca un chico: "jajaja nadie te habla eh?" Hacemos un porté y se va. 

Magno se acerca...¡merde!
Lia pide permiso para ficar con Pascual en nuestro motel. Adiós a mi llave.
Mientras? Deo, Tiago, Magno y yo a las Vespas. (malditas vespas)

Deo a sociabilizar que es lo suyo, Tiago desaparece y Magno me mira. 
Bailo compulsivamente y con los ojos cerrados para no tener que devolverle la mirada, finalmente decide verbalizar sus pensamientos: "¿te molesta que te mire? Llevo intentando captar tu atención toda la noche."
Respuesta confusa: me quiero ir a casa, tengo sueño, dónde está Deo, no tengo llave de mi casa y encima está ocupada.
Deo no aparece, yo fuera sola con el tiratejos, sin llave, CRISIS
Se me acaban las excusas, se me acerca, me va a besar, preparo la cobra, llega Deo. Fiuu. 



Al día siguiente nos vamos al monte (que en portugués viene a ser como ir al huerto). Bonitas vistas. Deo conversa sin parar, yo guardo silencio, el tipo llamado Carlos Magno me incomoda (Magno de segundo nombre, no de apellido)
Planeamos cena en casa. Magno, Tiago, Deo y yo, bebiendo kalimotxo y tocando la guitarra. Hasta las tantas. Nos vamos a un bar, warm up, y jugamos a las cartas a la luz de las velas, y a ritmo de nirvana.
Volvemos para casa, se quedan a dormir.
¿QUE?
Noche perturbadora, 4 en dos camas, entre la consciencia y el sueño he de soportar las insinuaciones de Charlemagne.
Se hace de día, salgo de mi prisión, llamo a mis compañeras de piso, se parten el culo: ¡Eres una pringada. Aprende a decir que no y déjanos ver Lost!
Tiago se va, Magno se queda. Sorprendo a Deo y Magno hablando de mi. ¡Puf, lo que me faltaba!.
Magno se ofrece de guía, vamos a su coche, recogemos a Lia y nos vamos a unos acantilados increíbles!!!!!!!!!!!!! Dejamos a Lia, nos reunimos con Tiago y nos vamos a cenar.
Acabamos en el warm up, todos desaparecen y Magno decide verbalizar sus pensamientos: 
(Literalmente)
-has notado ya que te encuentro atractiva?? 
Digo: eeee y pienso ¿qué tipo de frase es esa?
- Y? 
Digo: eeee y pienso ¿y qué capullo? ¿y no has notado que yo trato de desvincularme educadamente?
- Estás interasada? 
Digo: eeee no!? (bien! he pronunciado un "no"!!!) y pienso ¡las cazas al vuelo, eh?! 
- Ah...es porque soy feo o porque tienes novio? 
- Supongo que tengo que decir que tengo novio...  [a no ser que prefieras que te llame feo]
El pobre sufre la bofetada, yo me libero. 
Vamos para casa. Sólo nos queda un día.
Charro, té y a la cama.


Amanecemos pronto para hacer cosas y nos encontramos con que tenemos que dejar la habitacion...aaaagh!! Limpiamos, recogemos, nos duchamos y vamos a cargar el teléfono. Llamamos a Tiago, en casa del cual íbamos a cenar esa noche: -podemos dejar las cosas en su casa? -claro! Viene a buscarnos.
Tarde de peli, turismo y vino.
Sus amigos se van rajando uno a uno y no hay noticias de Magno (fiuu), Lia o Erika.

Hacemos la comida, el cocinero no pilota mucho, se corta con un vaso y monta la de dios..pretende llamar al 112, Deo y yo controlamos la situación. Me ofrezco a coserle con hilo y aguja. Finalmente huye a la farmacia (¿?¿?) le dan puntos de papel y betadine. Deo y yo procedemos a la cura... ¡hombres!
Nos sentamos a cenar con Luis y Sandra que tienen un grupo. Después llegan las vecinas: dos hermanas muy majas, Bruna y Nidia. Nos vamos a ¿un karaoke?
Tras flipar con la voz de Sandra, salimos con ella a cantar Pour que tu m´aimes encore
Llegan Lia, Erika y Marta para despedirse.
De madrugada, Sandra, Luis, Tiago, Deo y yo nos vamos a la playa con vino de gasolinera a tocar la guitarra. Tras grandes momentos de garbage music (pero muy muy grandes: Lola a la bolsa de plastico!!! ueeee) llega el momento de irse a casa para recoger a Nidia que viene en nuestro vuelo y salir para el aeropuerto. 
Fin del carnaval.
Vuelta a casa aún con la versión de Dul N Nouk White del fado de Amalia Rodrigues Gaivota.

MALUCAS EM MADEIRA (II parte)


.

DÍA 3
Día siguiente. No. Tarde siguiente.
Día de carnaval, no tenemos disfrazes (mi máscara murió, y el amigo de la monja se llevó el suyo). Ella compra un shari y me obliga a vestir de pirata/mujer maltratada (pintar parches en el ojo no es lo suyo).

Desfile bajo la lluvia, trajes increíbles, culos aún más increíbles y saaaamba, después cena, poncha (bebida típica) y Old bar: conversaciones variadas. Discuto con un punketa y me enamoro de su novia.

Decidimos ir a darlo todo a las Vespas. 

Sospecho que quiere ver a su menino, pero en el camino encuentro yo al mío: un chico guapo guapo, q me recuerda no se a quien (puede que a Dentadura-perfecta amigo de Marianne) me mira con curiosidad, devuelvo la mirada y cruzamos saludos. Además de guapo simpático. Nos despedimos y nos invitan a fumar al dia siguiente.

Vespas:
No consigo ver a Deo más de 2 segs seguidos, sociabiliza que te sociabiliza. Me voy al baño y encuentro a una moribunda. Un chico y yo la arrastramos fuera. Me encuentro con Ricardo (amigo de marta, del amazonia) preocupado por mí, nos ayuda con la desconocida. Logramos que nos dé su dirección y allá que me fui con el cadáver en un taxi, a entregárselo a su familia. Pago sus cuentas, y entre el taxista y yo la llevamos hasta la puerta, me deja sola con el muerto, abro su casa y lo lanzo dentro. Salgo 

Llamada de Deo, me espera en el baño, ha visto a su Nuno. Llego, llego al baño, llego con su menino y los amigos.
Uno de los amigos del que anoche fuera monja me mira y me remira, le devuelvo la mirada y me encuentro a un Snape sin encanto: pelito medio largo grasiento, nariz ganchuda y edad para ser mi profesor. Retiro la mirada, pero Snape se me acerca y me susurra: no me vas a saludar? 

MERDE!! 

Snape resulta ser la rubia con la que magree. MERDE MERDE MERDE.

Me hago la despistada y procuro guardar la calma allí plantada en territorio comanche en lo q Deo juega a la putilla con Nuno. 

Snape tiene exactamente las mismas manos largas que la rubia. Oh mon dieu.
No sé cómo me veo siguiendo a la putilla loca borracha que monta en el coche de su Nuno, y la sigo junto a "mi menino".
Nos llevan a su choza... Apartamentos en lo alto de una colina con vistas al mar, un duplex rollo minimalista. Increíble.

Ella jugando a la borracha putilla, yo apartando manos. Snape capta la directa y se va a dormir. 

Deo desaparece sin sujetador y con Nuno y yo me quedo fumando charros en la terraza con los otros dos colegas. Rato después todos a la cama, ellos a las suyas, yo de vuelta a la mía y ¿Deo en la de todos?
Cierro un ojo en mi cama y llama Deo, ¿dónde estoy? Elle a fait des betisses...ouais, je sais. 
[*Ha hecho tonterías..sí, lo sé]

Continuará

MALUCAS EM MADEIRA (I parte)


.

Con esto de planear los mil viajes que tengo previstos para 2011 me ha venido a la cabeza uno que hice hace ya algún tiempo a los carnavales de Madeira. 
Una locura de viaje que compartí con una amiga francesa de la que me acuerdo cada vez que tengo el cuello calentito gracias al pañuelo que le robé... 

[Técnicamente no se lo robé, sino que lo encontré en medio de la ciudad colgado de un árbol y puesto que lo había comprado con ella lo reconocí enseguida. ¿de quién cabe esperar encontrar su pañuelo colgado de un árbol? De nadie sino de Deo.]

Tal como lo conté entonces lo cuento hoy:

Mi avión salía el jueves 11 a las 7 y media de la mañana, pero "pobre de mi", me vi obligada a salir con mis compañeras de piso y su colega de visita. Tras un cenorrio poderoso, dos botellas de vino, birritas y copazo, lo dimos todos en el Jamaica, y cuando me quise dar cuenta, eran las 6 de la mañana, así que los metí a todos en un taxi y nos fuimos a casa a hacer la maleta.

En lo que metía y sacaba cosas de la mochila salió el tema "hola soy Lola y mi amigo tiene problemas en la cama" que nos distrajo lo suficiente como para que saliera de casa sabiendo que la ventana de facturacion ya estaría cerrada. 

En el taxi, yo y mi sentimiento de culpabilidad, recibimos la llamada de Deo, mi compañera de viaje, que gracias a las fuerzas de la naturaleza também apañaba el taxi en ese mismo momento.
Una vez en el aeropuerto, ambas borrachas y retrasadas tuvimos que pagar la misma cuantía del billete (a los 60 euros ida y vuelta se sumaron otros 50 euros ida) para partir ese mismo día por la tarde.
Total, las retrasadas volvimos a casa a dormirla un petit peu

Tras un sueño más que insuficiente y una ducha más que necesaria voltei para el aeropuerto. Cogimos el avión, Deo, su chocolate, mi tos y yo.

Madeiiiiiiiiiiirrrrrrrrrrrrrrrrrra.

La locura de mi compañera de viaje empezó a asomar su fea cabeza desde el principio, pero nada me haría presagiar lo que pasaría en la isla.
Una vez aterrizamos comprobamos que no teníamos autocarro para ir al centro, malasuerte, pero divisamos una joven menina con cara de simpática que finalmente accedió a llevarnos junto a sus amigas a Funchal, suerte!
Cristina, Marcela, Joanna.
Nos dejaron en una zona de hostales pero estaban todos llenos así que nos fuimos al que Deo había reservado por email pero....no había tal reserva; así que tras minutos de agonía encontramos plaza en uno: residencial Zarco (descubridor de la isla)
Una habitacioncilla con kichenette, baño, mesita y flores.

Para saciar nuestra fome voraz nos fuimos a buscar un bar joao (bar pepe) en el que cenar. Después, el dueño nos propuso acercarnos al casino (por lo visto punto de animación de la isla) y allá que fuimos en el coche del senhor a tomar unos cócteles y reirnos de los jugadores.

Voltamos a pie hablando con cada sujeto susceptible de fumar charros... Con una ristra infinita de nuevos contactos en la agenda de la loca francesa y 0 droga en nuestro haber, llegamos a nuestra plaza. Allí, divisamos a un joven menino fumando: un rato de charla animada, 3 charutos y una cita para el dia siguiente después, subimos a dormir.



DÍA DOS
Al día siguiente compra, visita, búsqueda de disfraz, bla bla bla 
Llega la tarde y nos plantamos en un antro llamado Old bar, donde la birra cuesta un euro, hay shots a granel, buena música, futbolín, terraza y un dueño gordo con melena y tatuajes deseoso de hablar español. 

 Allí conocimos a Marta y a su marido que nos informan de que esa noche es la fiesta de los travestis. Quedamos con Marta y nos fuimos a casa a cenar, beber y charlar. Ya se nos había hecho tarde cuando nos plantamos ella, su disfraz de mora y yo y mi preciosa máscara con plumas de pavo real en el Old bar. (ni rastro de nuestro camello de la noche anterior) 

El marido de marta nos dice que ella ya se ha ido pero la llama y nos informa de que viene a por nosotras (!!!). Charutos, birra y pink floyds. 
Llega Marta y nos lleva al sitio en cuestión: Amazonia. 
Travestis por doquier (más hombres de mujer que mujeres de hombres...¿por qué les gusta tanto?) 


Allí nos presenta a su cuñada Lia y sus amigos Erika y Ricardo con el que nos quedamos cuando ellas se fueron....

Sobria como una rata contemplando la embriaguez de Deo y su incalificable sociabilidad, me sorprendo hablando con una rubia que me tira los tejos mientras mi amiga trata de ligarse a una monja. 

Locuras varias después (intercambio de disfraz de Deo con uno, pérdida de mi preciosa máscara, conversaciones extrañas...) la rubia consigue acortar distancias conmigo.

A estas alturas, la taja era un hecho.

Nos montamos en su carro. A lo lejos oigo la risa de Deo a modo cortejo para la monja que resultó llamarse Nuno.

Llegamos a nuestro destino y consigo deshacerme de las manos de la rubia. 
Vespas, discoteca del lugar.

Nuestras mujeres pagan nuestra entrada y vamos a por la consumición.
Bailoteo. 
Deo se camela a su monja. 
La rubia se me arrima cada vez más. 
Mis neuronas reaccionan, me aparto y en una clara, breve y concisa frase dejo clara mis intenciones (o la falta de ellas).
La rubia se me ofende. 
Ni rastro de Deo. 
Suficiente por hoy, me voy sola a la casa.

Llama Deo, viene, ¿por qué no la he esperado?

DÍA TRES
(continuará...)