LA MADRE DE TODOS LOS VICIOS
16.de
Desvaríos de una antropóloga frustrada, aventuras de un aquelarre y desventuras de un sanedrín... como la vida misma: impar.
Etiquetas: bello y bestia, envidia, naomi, normal, parejas
Te leí desde Italia y con el móvil, pero no podía comentar.
Lo ideal es la elección, está claro, pero no todo el mundo puede elegir.
Y la verdad es que no conozco a nadie que sea soltero/a por convicción, de forma cerrada; aun no me he topado con nadie que renuncie al amor de verdad una vez encontrado.
Creo que todo el mundo pasa por una fase de obligación en algún momento. Cuando quiere y no puede, porque a veces el querer se centra en una persona y no se es correspondido. Les pasa a los bellos, las bestias y hasta a las vestales...
Ahora, mientras sea momentaneo no importa, y tampoco me preocuparía demasiado por lo de caer en la normalidad: ser raro está muy sobrevalorado.
Saludos.
lola lolita lola
me gusto mucho esta entrada guiño guiño, pero es entreteniada la verdad a ver si superamos esta blogsequia ke nos acecha ultimamente
a ver si me llamas...